lunes, 30 de enero de 2012

Work in progress



La Compañía Nacional de Danza (CND) llegaba este fin de semana a Santander con nuevo espectáculo y nuevo director, José Carlos Martínez, tras la salida forzosa de Nacho Duato -dos décadas al frente de la compañía- parece no haberse tomado muy bien este final y ha decidido prohibir que se representen sus coreografías, postura “muy acertada” si le interesa que su obra siga siendo conocida. Situación que obliga a la compañía a empezar desde cero y renovar toda su estructura.

Parece que el tema de la difusión de la cultura está de moda y la semana pasada, saltaba la noticia: el FBI cierra Megaupload y detiene a su fundador y a sus socios. Bien es verdad que estos llevaban a cabo una actividad ilegal, ofrecían de forma totalmente gratuita servicios de música, cine, TV…con el desagravio económico  que supone para sus autores. Pero el debate va más allá, ¿tiene precio la cultura? Si es así, ¿hay un límite? De momento el FBI ha actuado y sí, a cualquier precio, porque hay millones de usuarios que con el cierre de esta Web corren el riesgo de perder todos los archivos que tenían colgados en ella, ahora, ¿qué pasa con ellos? Parece que las últimas noticias no son muy alentadoras, los usuarios de Megaupload podrían perder sus datos este jueves. La polémica está más que abierta.

Me niego a creer que en la sociedad de la información y las nuevas tecnologías, donde con diferencia de una semana sale al mercado un ordenador o un móvil con más prestaciones que el anterior, la solución a un problema como este sea la intervención policial, el veto de numerosas páginas de Internet (pues de los enlaces de ésta dependían muchas otras) y la detención de sus creadores, y se acabó problema resuelto. No podemos ser tan radicales, habrá que buscar un punto intermedio en el que la industria cultural no salga tan perjudicada como dicen y los usuarios puedan acceder a sus contenidos de una forma más asequible que la que se plantea y más cómoda.

Si el objetivo y todo nuestro interés lo ponemos en buscar alternativas y que la cultura prime por encima de todo se encontrarán soluciones.

Ahora entiendo el título del espectáculo de la CND Work in progress, es la solución.



I. Casanueva García