La crisis económica que actualmente sufre nuestro país ha provocado un disparo de la cifra de personas sin techo en la ciudad de Barcelona desde 2008 cuando apenas rozaba el millar.
Un estudio realizado por la Red de Atención a Personas sin Hogar que consta con 27 entidades, afirma que en 2008, cuando la crisis comenzaba a mostrar sus efectos, eran unas 265 personas las que vivían en asentamientos y ese número se ha incrementado un 32%. Estas personas, afectadas por la crítica situación en la que se encuentra la economía española, recurren a estas entidades sociales y a los Ayuntamientos para solicitar ayuda cada día.
Así, los albergues públicos y otros alojamientos de entidades sociales, según el citado estudio, acogen diariamente a unas 1100 personas y otras 800 duermen en la calle escogiendo entre chabolas, vehículos, portales, entradas de establecimientos y lugares abandonados.
Los distritos de la ciudad donde más personas sin techo habitan son Eixample y Ciutat Vella, con un 47%, y el siguiente se correspondería con Sant Martí (14%). En cuanto a las edades más frecuentes determinadas, el 31% ronda los 26-45 años; el 24 %, entre los 46-65. De estas personas, y haciendo referencia a los últimos datos estimados, unos 500 eran extranjeros y 300 españoles.
Pero por si el problema fuese pequeño, se hace más complicado aún al saber que una gran parte de estas personas padece patologías mentales como la esquizofrenia, drogadicción, alcoholismo, trastornos de personalidad, etc. por lo que su riesgo de exclusión social queda muy multiplicado.
Los recursos que presta el Ayuntamiento de Barcelona así como los de estas redes de entidades sociales son insuficientes frente al enorme crecimiento de las cifras y por ello la regidora de Calidad de Vida, Maite Fandos, hizo el pasado miércoles un llamamiento para facilitar pisos de alquiler económico al Consistorio ante el “aumento importante” de personas sin techo. Los recortes de ayudas son uno de los principales factores que llevan al disparatado aumento de las cifras.
Se trata de un ejemplo más de los efectos de esta crisis que nos inunda y a la que nadie parece poner solución. Una crisis que no únicamente está afectando a los grandes o medianos empresarios que caen en picado sino que, además, está dejando bajo tierra a aquellas personas que antes de ésta ya estaban en la calle. Y es que los medios no paran de informar sobre el cierre de negocios y del número de personas que se quedan en paro pero, ¿Qué hay de aquellas personas que ya estaban en una mala situación antes de la crisis?
De lo que no cabe duda, es de que cada vez son más los efectos desastrosos con los que la situación económica está cubriendo el país, efectos que le costarán al gobierno muchos años de recuperación y que si ya se nos muestran muy graves deberían mostrársenos peor, como realmente son.
Claudia de Gea.
Yo estoy totalmente de acuerdo contigo, porque como citas, los medios de comunicación están informandonos acerca del numero de personas que se quedan desempleadas y de los registros del INEM,pero no se nos informa absolutamente nada acerca de la gente que en época de bonanza estaba en una situación por debajo del Estado de Bienestar y no nos detallan en que situaciones están actualmente.
ResponderEliminarPor tanto que dejen atrás de una vez esa búsqueda de morbo y que comiencen a informar sobre esa situación y crear opinión pública acerca de estos acontecimientos para que nuestros representantes lo intenten solucionar.
J.Marrón Alonso
Este tema es muy complicado y escabroso, por lo tanto considero que es muy dificil encontrar una situación, en un momento de crisis como el actual los gobiernos se olvidan de la gente que antes de la recesión ya vivia en la calle, y solo se preocupan por recuperar la estabilidad de aquellas que vivian con cierta olgura, esplicandolo de otra forma, el gobierno solo se preocupa de los "nuevos pobres" que deben cus circunstancias a la crisis.
ResponderEliminarPor otro lado opino que si este tema no esta tratado en las noticias es porque no interesa, porque las cadenas televisivas no dejan de ser empresas que necesitan hacer audiencia para sobrevivir y que si hablan de ciertos temas que a la gente les agobia o les amargan acabaran cambio de telediario, también porque ciertas noticias que auguran que la situación va a empeorar no ayudan al correcto desarrollo y evolución economica.
R. Sánchez Antúnez.
Este tema me parece algo lamentable, porque si no recuerdo mal, la actual Constitución española reconoce el derecho de todos (y subrayo todos) los ciudadanos a una vivienda digna.
ResponderEliminarSi se toman tantas molestias para derrogar leyes que se consideran inconstitucionales, ¿no es permitir que haya gente sin techo también inconstitucional? Los albergues no son suficientes, deberían habilitarse más espacios.
Sé que sonará polémico, pero no veo mal que los edificios que están desocupados sirvan para alojar a estas personas que carecen de hogar (porque no nos vamos a meter a opinar sobre las personas que deben entregar sus casas para hacer frente a las hipotecas). Yo no lo veo tan descabellado: yo tengo una casa que no uso, tú no tienes casa, ¿qué mal puede hacer que yo te ceda mi casa?
Pero, claro, ya nos hemos acostumbrado a ver a los mendigos por las calles, a ignorarlos, como dice Rosalía, porque nos resulta desagradable. Sí, señores, ahí esta nuestra conciencia social.
Menos gastarse 82000 euros en un retrato para el señor Bono por haber sido presidente del Congreso, y más pensar en los ciudadanos, que ahora necesitan las ayudas más que nunca.
M. Patrón Sánchez
Nunca nos acordamos de las garantías sociales para los más desfavorecidos hasta que se llega a situaciones límites, pero los ancianos, las personas con discapacidad, los emigrantes y demás grupos con peligro de exclusión social, casi siempre tienen cubiertas sus necesidades de forma muy precaria, y ahora, que la situación económica es muy mala, son los que más la sufren, cuando debían ser los primeros en tener garantizadas sus prestaciones. Pienso que quizás los recortes debían llegar a otros sectores como defensa, gastos de representación... por poner un ejemplo y no en ayuda sociales.No se cual puede ser la solución, pero creo que son temas que tienen que estar pactados, sin importar el partido que este en el gobierno, y la situación que viva el país
ResponderEliminarRocío Brizuela Paterna
Estoy totalmente de acuerdo con Marina. ¿Qué hay de esos derechos constitucionales y garantías que reconocen al acceso a "una vivienda digna y adecuada", como también el de: "deber de trabajar y derecho al trabajo" o "pensiones adecuadas y periódicamente actualizadas, que garanticen la suficiencia económica a los ciudadanos durante la tercera edad"? En momentos de crisis económica como el actual son de los más afectados, los gastos en garantías sociales se dejan de lado como dice Rocío.
ResponderEliminarSí, es cierto que sobre noviembre suele comenzar una campaña en apoyo a los sin techo para proporcionarles un lugar donde dormir durante el invierno, pero no basta con hacer una buena obra en invierno y olvidarse del problema el resto del año.
Como decís en los últimos años las personas en estas condiciones han aumentado y ya no es sólo gente con riesgo de exclusión social por temas de drogas, alcohol, etc. Hay personas que han perdido su trabajo o su negocio se ha ido a la ruina y ahogadas por las deudas se han visto en la calle.
Es la realidad y parece que no queremos afrontarla, principalmente por parte de las instituciones que con decir eso tan usado de que estamos en crisis hay que hacer un esfuerzo, no tenemos otro remedio...parece que tengan carta blanca para hacer de todo y pasar por encima de todos.
Que empiecen por revisar los sueldos de los concejales del ayuntamiento de Madrid por ejemplo, que por lo que se ha conocido hace poco superan casi todos, el del presidente del Gobierno que no es precisamente bajo.
I. Casanueva García
Me parece vergonzoso que en pleno siglo 21 y en un país desarrollado como es España, hayan personas que no por propia voluntad se encuentren viviendo en la calle, en condiciones insalubres y por debajo del Estado de Bienestar. Antes de apoyar a las personas que aún pueden subsistir por sus medios, el Estado debería sacar de la pobreza a estas personas, al menos incentivándolos y ayudarles a empezar bajo unas ciertas condiciones básicas.
ResponderEliminarLaura Martínez García